Los nuevos gadgets de bajo precio ayudan a niños y adultos a combatir el estrés, disminuir los niveles de hiperactividad y calmar los nervios.

Los juguetes sensación para jóvenes como para adultos, se han convertido en los aliados ideales para combatir los nervios y la ansiedad tanto en ámbitos educativos de tipo escolar o universitario como en las oficinas.

La insaciable demanda por los simpáticos artefactos no tecnológicos de bajo precio parece no conocer límites en los EEUU, convertidos en un objeto indispensable para niños y adultos quienes aseguran son una herramienta efectiva para combatir la inquietud, que además ayudarían a tratar el cada vez más común trastorno de deficit de atención e hiperactividad sin depender exclusivamente de medicamentos.

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Distintos productos para combatir la ansiedad como las pelotas contra el estrés han estado disponibles durante décadas, pero al parecer su efectividad no se compara con los nuevos objetos que hoy son usados en masa para descargar el exceso de energía.

Los juguetes tienen formatos de lo más variados, desde cubos plásticos que permiten girar ruedas, presionar interruptores hasta trompos metálicos de hipnótico movimiento y curioso efecto tranquilizante. Posicionados entre los diez juguetes más demandados en Amazon, sus precios en torno a los USD 5 los convierten en una solución accesible para todo el mundo, en una era donde los gadgets modernos se caracterizan por sus precios exhorbitantes.

Uno de los modelos más populares y completos es el Fidget Cube de Antsy Lab, una startup que comenzó con una humilde campaña de recaudación de fondos en Kickstarter buscando obtener USD 15.000 para financiar la fabricación de un curioso cubo compuesto de botones, interruptores y discos giratorios y que gracias al éxito de su propuesta lleva acumulados USD 6,4 millones.

La finalidad es hacer sentir a su usuario relajado y lograr que se concentre en algo más que la pantalla de su smartphone, dispositivos que han sido puestos bajo la lupa de expertos en los últimos años, acusados de generar una dependencia nociva afectando directamente la capacidad de concentración.

Juguetes como el cubo Rubik, los YoYos y otros que suelen mantener las manos ocupadas han visto un aumento de sus ventas, parte de la tendencia que busca soluciones de bajo costo a los crecientes niveles de ansiedad, fenómeno potenciado por la infinidad de posts en redes sociales y videos subidos a YouTube sobre los “milagrosos” dispositivos que seguramente sigan presentando nuevas variantes en el corto plazo en un intento de abastecer la “sed moderna” de juguetes anti estrés.