El duelo entre Brighton y Newcastle por la Segunda División inglesa contó con un tanto repleto de carambolas. El autor (casi involuntario) fue Mohamed Diamé y su equipo terminó ganando 2 a 1.

Faltaban apenas diez minutos para el final del encuentro y Brighton ganaba 1 a 0, pero el senegalés terminó siendo beneficiado por las pifias de dos compañeros que no pudieron rematar con precisión tras un tiro de esquina. Al tercero le rebotó el balón y fue a parar directo al arco rival sobre el arquero y pese al esfuerzo de un defensor que estaba en la línea.

Lo cierto es que este tanto del empate valió oro, ya que minutos después iba a aparecer Ayoze Pérez para terminar de darlo vuelta y sentenciar el triunfo para el conjunto visitante.