La advertencia fue realizada por vecinos de la misma comunidad, quienes aseguraron que un grupo de personas se organizaba para instalarse en las viviendas que aún estaban en construcción.

Un total de cinco familias usurpó ayer varias casillas del barrio Esperanza y se rehusaría a dejar el lugar.

Se trata de casillas de madera que fueron edificadas por la Municipalidad de Corrientes para familias con necesidades urgentes y que según se pudo conocer, las familias decidieron meterse en las casas porque, aparentemente, hace varios meses se le prometió un lugar donde vivir.

«No nos vamos a ir de acá porque somos madres, muchas mujeres están embarazadas y necesitamos las casas», indicaron las okupas, a lo que agregaron: «Nos prometieron que esto iba a ser nuestro y hasta el momento no hay respuestas».

Dado que hasta el momento las casas no tienen adjudicatarios ya que no fueron terminadas, insistieron también en que se les den los materiales para que ellos puedan terminar las obras. Aún con sus hijos en brazos, las mujeres se mostraron dispuestas a luchar por las casillas y resaltaron: «Tenemos niños muy chiquitos, algunas de las chicas están embarazadas, por eso no nos podemos ir».

Fuente: El Libertador