Con motivo de la despedida de un cabo y un oficial que iban a ser trasladados a otros destinos, policías de Goya realizaron días atrás una fiesta descontrolada en la Comisaría Segunda de dicha ciudad.
“Iba a ser un festejo intimo en la Comisaria, pero se descontroló en el cambio de guardia, cuando llegó un sargento diciendo que tenía el teléfono de ‘amiguitas’ y amigos, para que se sumen a la fiesta”, contó Juan Cruz Velázquez, periodista de TN Goya, en contacto con Palabras Cruzadas.
Comisaría Segunda de Goya
“Los invitados llegaron y el festejo se trasladó al quincho que hay al fondo de la comisaría, donde pusieron música y tomaron alcohol, tragos. Iban con una camioneta de la policía a buscar bebidas alcohólicas a un quiosco que está cerca de la comisaría”, relató Velázquez.
“Luego también sumaron a la fiesta a un preso y le hicieron poner plata para comprar un cajón de cerveza, según contó luego el interno. Inclusive a él lo filmaron, en la fiesta teniendo relaciones con una chica”, relató el periodista de TN Goya.
“Luego de algunas horas los vecinos comenzaron a quejar, por la fuerte música que salía de la camioneta policial, con la que animaban la fiesta”, agregó.
“Actualmente se está realizando un sumario interno. Se envió todo el informe a Jefatura, en Capital, y ahora la policía local está a la espera de que envíen a Asuntos Internos a esta ciudad para investigar los hechos que ocurrieron”.
“Por lo que pude enterarme anoche, esta no sería la primera vez que ocurre algo semejante aquí. Y ahora piden que vayan con todo el peso de la ley contra esta guardia, precisamente por no ser la primera vez que realizan este tipo de fiestas”, comentó Velázquez.
Finalmente, el periodista comentó que debido a la difusión que le dio al caso, le llegó una citación de la policía para que presente material de prueba sobre lo que hizo público. “Me citan a mí para que me presente a aportar pruebas, es una locura”, manifestó.
“Anoche hablé con uno de los oficiales que están en la investigación, y me dijeron que ellos ya tienen todos los datos sobre lo ocurrido, los nombres de los participantes, e incluso el relato del preso. Es decir, no necesitan nada de mí, porque incluso tienen mucha más información sobre lo que ocurrió. No quiero pensar que hacen esto molestos porque lo haya hecho público”, reflexionó.
“Quizás pretenden que deje de hablar de este tema, pero no lo voy a hacer, porque es algo gravísimo lo que ocurrió. Es una joda loca: mientras a la gente en la calle le están robando, ellos están de fiesta dentro de la comisaría”, finalizó.