El presidente de la Fundación Pro Tejer advirtió que el sector atraviesa un momento complicado, con una caída del 30% interanual en septiembre, sumado a un fuerte aumento del 15 por ciento en las importaciones.

El presidente de la Fundación Pro Tejer, Jorge Sorabilla, advirtió ayer que el sector atraviesa un momento «complejo y difícil», con una caída del 30% interanual en septiembre, sumado a un fuerte aumento del 15 por ciento en las importaciones.

Fue al inaugurar la ProTextil 2016 ante unos 1.500 empresarios, la vicepresidenta Gabriela Michetti y el director de Aduanas, Juan José Gómez Centurión.
La actividad productiva de la industria textil anotó en septiembre una caída anual del 25% con la supresión de unos 20.000 empleos acumulados en lo que va de 2016.

La situación fue expuesta con datos relevados por la Fundación Pro Tejer en la Convención de la Agro Industria Textil & Indumentaria de Argentina, que se llevó a cabo ayer en el Hotel Hilton de Puerto Madero, que fue abordado en detalle, además, en un informe del sector presentado por el director ejecutivo de la entidad, Ariel Schale.

Al abrir la ProTextil 2016, Sorabilla aclaró que en 2016 la Fundación Pro Tejer no dejó de comunicar las problemáticas del sector, siempre con el ánimo de ayudar a mejorar la coyuntura, aunque hubo algunas declaraciones que fueron malinterpretadas.

«Debemos apoyar públicamente las medidas que nos favorecen y señalar los problemas de la cadena de valor, siempre con las mejores intenciones porque nuestras palabras no deben lastimar sino contribuir al desarrollo de la economía del país», dijo Sorabilla.

Con las fábricas operando el 65% de su capacidad instalada, los empresarios textiles aseguran que fue la combinación de dos fenómenos lo que impactó este año en la actividad, pero son optimistas respecto de poder reencausar el rumbo.

«Hubo una mezcla explosiva: la caída de la demanda del consumo interno con el aumento de las importaciones. Eso generó recortes en las horas trabajadas, suspensiones y cesantías en algunas plantas», sostuvo Sorabilla.

Las importaciones totales hasta el 30 de septiembre alcanzaron 176.700 toneladas, lo que significó un incremento del 15% anual, con datos que alertan como 26% de crecimiento en el ingreso externo de hilados, indicó, en tanto, Schale.

Por su parte, el presidente de la Fundación Proteger dijo que hay «una muy buena noticia: hay una desaceleración de las importaciones. De todo el incremento de este año, el 89% se registró en el primer semestre».

El 60% cree que 2017 será mejor año

La inflación comenzó a ceder en septiembre y la economía mejorará en el 2017, según la percepción del 60% de los argentinos consultados, mientras se está reconfigurando un nuevo tipo de consumidor que se empieza a preguntar «cuál es el valor real de las cosas que compra».

Así lo indicó ayer el director de la consultora «W», Guillermo Oliveto, en una conferencia sobre Sociedad, Consumo y Mercado presentada en la Pro Textil 2016.
Ese nuevo consumidor argentino, dijo el experto, espera que las empresas bajen sus precios o al menos no los suban con tanta celeridad, mientras identifica como culpable de la inflación al Gobierno y no al sector privado.

A partir de tener que haberse reacomodado a la nueva realidad económica, el consumidor que se viene para el mercado argentino es «más prudente, más desconfiado, más autocontrolado y finalmente muy calculador, que está mirando cosas que antes no miraba», dijo Oliveto.

El experto les dijo a unos 1.500 empresarios textiles presentes en el auditorio que las empresas argentinas tendrán que salir a reconstruir el «deseo» en sus clientes porque hay menos «tentación automática».

El consumidor que viene está «reseteando» una forma de comprar luego de doce años: pasa de «comprar mucho a comprar bien», dado que ya no debe anticipar gastos porque la inflación comenzará a dar respiro, según prevén las encuestas de la consultora «W».

El 82 por ciento de las personas consultadas en la encuesta de septiembre dijeron que si las empresas pretenden incrementar sus ventas, deben dejar de ofrecer tantas promociones y ofrecer directamente valores más económicos.

«La gente escucha que le dicen: ‘Vení que en la segunda unidad tenés un 80% de descuento’. Entonces, ahí, el nuevo consumidor comenzó a preguntarse cuánto valen realmente las cosas que compran y eso los lleva a prestar más atención», dijo Oliveto.

Los textiles «no son culpables de la suba de precios»

El titular de Pro Tejer, Jorge Sorabilla, destacó que «para cuidar a los consumidores se debe entender que los productores textiles no son culpables de las subas de precios porque esa problemática está atravesada por otros problemas». Y afirmó que «existen altos costos productivos que son generados por fuera de la cadena, como la renta inmobiliaria, que en la Argentina es de las más altas del mundo, además de la carga fiscal excesiva, el ausentismo laboral y la litigiosidad, que son escollos que hay que resolver».

Esos factores, sumados a los de caída de ventas por un contexto de demanda recesiva, generan además un cambio de expectativas comerciales que se refleja en una parte importante del canal mayorista. Sorabilla dijo que el sector, con sus 20.000 empresas textiles y de confección que generan 450.000 empleos directos, apoyará todas las políticas de Estado que sean apropiadas generar el desarrollo productivo de la Argentina.

Michetti anunció un plan para generar empleo

La vicepresidenta Gabriela Michetti anunció ayer un proyecto para «generar empleo» que consiste en «recuperar la artesanía textil argentina de alta calidad» con valor agregado.

Consideró que «la salida de la pobreza está atada al trabajo» y destacó el papel de la industria textil en la generación de empleo, al inaugurar la ProTextil 16. Entre los sectores que se van a promover se incluye vicuña, oveja y otras «tradiciones culturales de Argentina a las que le agregaremos diseño, y vamos a capacitar masivamente a muchas mujeres que hoy no tienen trabajo para que lo puedan hacer en su hogar con sus hijos y las haga más independientes».

La vicepresidenta aseguró que «el Gobierno está para ayudar en todos los pasos de la cadena de valor», y dijo ver «grandes oportunidades para potenciar este sector y muchos otros».

Se refirió a los primeros meses de gestión y explicó que «cuando uno sale de la mentira y la ficción, y pone la verdad sobre la mesa, siempre hay dolor al comienzo. Se producen situaciones difíciles, pero al poquito de andar con la verdad las cosas se sanan y se revierten para bien».

Fuente: Diario Popular