La modelo puso la condición de tener un fin de semana largo al mes para poder estar con su familia.

A la producción del Bailando le costó pero finalmente logró convencer a Pampita de que sea jurado del certamen, luego de su reemplazo a Moria Casán el año pasado.

-¿Quién creés que será la revelación este año?

-Ay no, veamos los primeros días. No quiero imaginarme, quiero llegar ahí y ver qué tiene para dar cada uno, que tan preparados llegan al primer día.

-¿Vas a ser exigente?

-Sí, siempre voy a ser exigente porque me gusta que se comprometan con el show, que presenten algo bueno. La gente tiene expectativas sobre cada uno de ellos y tienen que devolver esa expectativa. Tienen que ensayar un montón y divertirse, eso se nota un montón. Cuando ves que la están pasando mal, que se quejan mucho, y no lo están viviendo con alegría, eso se transmite a la hora de bailar.

-¿Viste cómo quedó tu participación en la apertura?

–Ya la hicimos, no vi nada.  Si aguanto una semana más sin ir a Ideas a que me lo muestren, lo veré directo en el comienzo del programa. Me estoy conteniendo porque me gustaría verlo en ese momento, en el aire.

-¿Y la pista a bailar vas a ir?

Siempre que me inviten vuelvo a bailar porque me gusta mucho estar en la pista. Me parece un regalo, ellos como producción te ponen todo para que te luzcas y puedas elegir con qué te sentís más cómoda.

-¿Vas a faltar para poder llevar a Chile a tus hijos?

Jueves y viernes, una vez al mes, voy a faltar. Yo quería no sentir que hasta el 20 de diciembre tenía todas las noches tomadas. Tal vez lo uso, tal vez no, pero al menos lo tengo en el contrato.