El «consumo hormiga», aquellas erogaciones impulsivas que parecen chiquititas, se pueden representar hasta cinco veces el salario promedio de la economía. Qué se consume sin pensarlo dos veces.

Un paquete de cigarrillos por día cuesta, en promedio, 51,5 pesos. El fumador no repara en ese gasto: compra el atado y ya. Puede que, incluso, no repare en lo que le cuesta el vicio: son más de 17.000 pesos por año.

Es el ejemplo más típico de cuánto puede representar el llamado «consumo hormiga», esos pequeños gastos más o menos impulsivos de todos los días. Son pequeñas erogaciones que, al cabo de un año pueden significar hasta seis veces el salario promedio de la economía argentina, que no supera los 10.000 pesos.

La consultora Focus Market se dedica a indagar en estas pequeñas delicias de la vida cotidiana.

Supongamos un consumidor hormiga que un consumidor fuma un atado de cigarrillos por día. Además, día por medio le lleva un alfajor a su hijo. Dos veces por semana, compra un chocolate para su pareja. Como confía en su suerte, juega un billete de lotería de lunes a viernes. Tres veces por semana, se le pasa la hora del almuerzo por el fragor de la jornada, y lo soluciona con un pebete de jamón y queso. Sabe que el agua hace bien, así que se compra su botellita de medio litro por día, religiosamente. Dos veces por semana desayuna en un bar un café con leche con dos medialunas. Al hacerlo, deja propina. A veces saca el auto y tiene que pagar un estacionamiento; otras veces lo deja en la calle y le deja unos pesos al trapito. Y cuando no maneja y el transporte público es un infierno, tiene que recurrir a un taxi, al menos una vez por semana. De vuelta a casa, compra unos chicles y una revista.

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Si esta persona rutinaria -cualquiera de nosotros- repite esta gimnasia de gastos todas las semanas, habrá gastado en todo el año 62.760 pesos en consumos hormiga.

 

Comprar dos paquetes de galletitas de 25 pesos a la semana significan 200 pesos por mes o 2400 pesos por año. Tres sandwiches de 35 pesos semanales significan, al final del año, 5040 pesos. Salir una vez por semana con el auto y gastar 90 pesos en el estacionamiento implica destinar a ese ítem 4320 pesos anuales. Los alfajores de precio módico, esos que engañan el estómago por 15 pesos tres veces a la semana, se llevan 2160 pesos por año.