Familias enteras decidieron salir a la avenida Maipú para pedir que las autoridades les den la posibilidad de seguir en el predio tomado.

Por segundo día consecutivo, ocupas del barrio San Roque Este volvieron a cortar la avenida Maipú al 5.800. Quieren evitar el desalojo que, estiman, puede darse el próximo domingo.

Acorralados por la notificación de la Justicia – fue entregada la semana pasada -, las familias que decidieron tomar tierras el pasado 8 de mayo buscan llamar la atención de la dirigencia política para luego intentar una solución al problema habitacional.

A casi dos meses de la instalación de las primeras estructuras de maderas y lonas, los habitantes del asentamiento se mostraron firmes para defender lo que consideran un derecho constitucional.

“La necesidad de vivienda es notoria en la provincia. Hay muchos prejuicios sobre nosotros. Sólo queremos expresar nuestro derecho constitucional de una vivienda. Necesitamos un techo para nuestros hijos y por tal motivo tuvimos que recurrir a esta vía”, dijo Ramón, uno de los jefes de familia que busca resistir.

En las últimas 48 horas, los ocupas decidieron salir a las calles y hacer visible su preocupación por el anunciado desalojo.

“De acuerdo a la información que nos suministraron en la Justicia el desalojo probablemente se concrete el próximo fin de semana”, señaló a época Alberto, otro de los ocupas del mencionado barrio capitalino.

Acosados por los tiempos y la falta de respuesta, los ocupas decidieron armar un plan de acción directa. Consiste en el corte de calles. El primero se concretó el martes por la noche en la esquina de avenida Maipú y Guayquiraró. Allí por el lapso de dos horas – 19 a 21 -, expresaron sus reclamos interrumpiendo el tránsito en ambos lados de unos de los principales accesos a la ciudad de Corrientes.

La historia se volvió a repetir en la tarde de ayer, cerca de las 18, cuando el sol se escondía, unas casi cien personas volvieron a la mencionada esquina para realizar un nuevo corte.

Antes de dirigirse a la protesta recibieron a cuatro integrantes de la Defensoría de Pobres.

Allí analizaron la situación de las personas que recibieron la notificación de la Justicia. Tras este encuentro, los ocupas realizaron una breve asamblea y a los pocos minutos encararon hacia la avenida Maipú al 5.800.

Con carteles, neumáticos y otros elementos para hacer ruido, adultos, adolescentes y niños se entremezclaron para realizar un piquete. Las llamas ganaron el asfalto y rápidamente se generó un caos vehicular.

Fuente: Época