En estos días de intenso frío, “Mi Cristo roto” es el único que abre las puertas a hombres mayores. Cuen­tan con 20 camas. Piden un sereno.

En medio de unas sema­nas de intenso frío, sólo un espacio está preparado para asistir a personas en situa­ción de calle. Los hombres son trasladados al hogar “Mi Cristo Roto”, donde reciben alimentos y abrigo; se trata del único refugio de invierno habilitado por la Provincia. Si bien la tem­peratura registrada en días pasados fueron muy bajas, la concurrencia al refugio ubicado en calle Niño Je­sús 829, es “normal” y no registró un incremento, de acuerdo a lo mencionado por su coordinadora, Ma­riela Revidatti.

“Sólo están ocupadas el 25 por ciento de las camas. No hubo una mayor con­currencia en los últimos días”, comentó y agregó que la mayoría se queda poco tiempo.

“Muchos no quieren que­darse y vuelven a las calles. Algunos se van durante la madrugada, el mismo día que los traen”, comentó.

El lugar funciona desde hace más de una década y cuenta con 20 camas. El alimento y el abrigo son entregados por el Ministe­rio de Desarrollo Social. El refugio necesita un sereno para el cuidado de las ins­talaciones por las noches, y aunque ya realizaron la so­licitud, hasta el momento no tienen respuestas. “Nos está faltando un sereno porque tenemos a alguien que se queda por las maña­nas a cuidar el lugar, pero no por las noches”, señaló.

Se trata del único espacio destinado a la contención de personas que viven en la calle. Años anteriores también estaba abierto el hogar San Juan Pa­blo II que funciona en el iglesia Nuestra Señora de Itatí, pero ahora solo alberga a personas del interior provincial.

Fuente: Norte Corrientes