La obras comenzarán en enero en ambos lugares. Se realizarán en forma paralela. Disconformidad de los comerciantes.

El Ejecutivo municipal dio a conocer el lunes las obras que tendrán lugar en el puerto de la ciudad, allí donde en 1987 la en ese entonces intendenta Ana María Pando los reubicó. No fueron pocos los gobiernos que intentaron sacarlos del lugar, sin éxito. Ahora la decisión estaría tomada y en pocas semanas más comenzarán las obras, según la palabra del jefe comunal.

El tradicional mercado del puerto cumplirá el año que viene 30 años de vida en ese lugar, ahora se trasformará en una moderna estación de transferencia – la primera de la ciudad-, la obra es parte del cumplimiento del pliego de licitación del transporte urbano de pasajeros. Este medio ayer consultó fuentes oficiales de la Comuna donde pudo confirmar que todos los detalles del traslado de los más de 60 puestos y 200 personas que trabajan en el lugar está contemplado.

El Piso es el lugar elegido por parte de la Comuna para la nueva ubicación. Según informe, la comuna ejecutará la ampliación del paseo de compras ubicado en Brasil y Belgrano utilizando lo que actualmente es playa de estacionamiento para generar nuevos espacios de venta. Las fuentes consultadas remarcaron que las obras de construcción del lugar se realizarán de manera paralela a las obras en el Puerto, pero no especificaron qué sucederá durante el tiempo de la obra. En conferencia de prensa el lunes, el intendente Ríos destacó: “No haremos nada para perjudicar el trabajo de los puesteros”.

Ánimos caldeados

Ayer NORTE de Corrientes volvió al Puerto local para tomar contacto con los comerciantes. “»Vimos en los medios todas las obras que se harán en este lugar pero acá nadie pasó a comentarnos»”, especificó Elba, una de las trabajadoras del lugar que llegó al puerto en 1987 y desde allí se dedica a la venta de indumentaria y algunos otros elementos que fue sumando a lo largo de los años.

Varios pasillos ayer se encontraban a oscuras: “»son problemas cotidianos, que los vamos resolviendo”», comentaron.

Al hablar sobre la posibilidad de la mudanza, los comerciantes se mostraron tranquilos pero aseguraron que no será fácil que las 200 personas que alberga el lugar decidan irse. Los puesteros más antiguos remarcaron que el sitio es estratégico. «“Hace 15 años, en esta fecha no se podía caminar por los pasillos, era un mundo de gente, ahora las ventas cayeron muchísimo, sobrevivimos como podemos”», insisten. En cuanto a la mudanza destacaron que por el momento esperarán ser notificados. «“Aguardamos que el intendente venga a charlar con nosotros, pero aún no pensamos tomar medidas, vamos a esperar»”, coincidieron.

Fuente: Norte Corrientes