Un estudio reveló que casi siete de cada diez argentinos creen que en sus barrios la presencia policial es insuficiente, pero al mismo tiempo el 79% no confía en las fuerzas policiales. Por otra parte, de la encuesta se desprende que para el 54% de los argentinos la percepción de inseguridad no se va a modificar dentro de un año.

En diálogo con ámbito.com, Lautaro Rubbi, profesor e investigador de la Fundación UADE a cargo de la investigación, evaluó los resultados del informe y aseguró que «la inseguridad se sigue manteniendo al tope de las preocupaciones de los argentinos».

Para el especialista, «lo que moviliza esa percepción es la baja confianza en las fuerzas policiales». En ese aspecto los resultados de la encuesta son concretos: sólo la mitad de los argentinos que sufrieron algún evento de inseguridad lo denunciaron a la Policía.

En ese sentido, Rubbi indicó que «el fenómeno de la percepción de inseguridad va de la mano a la desconfianza a la Policía y si bien no se hicieron preguntas que correlacionen los dos aspectos, del informe se infiere esa situación».

A la hora de plantear las soluciones alrededor de la inseguridad, el 39% de los encuestados considera que al entrenamiento policial es clave, seguido por el aumento de las penas (38%), una legislación eficiente (37%) y la solución definitiva de problemas sociales (34%).

Para Rubbi, las personas «perciben falta de entrenamiento» por parte de la Policía y considera que la solución planteada por los encuestados apunta a una mejora de la calidad del servicio policial. «Para las personas los aspectos más preocupante son los policías deshonestos y corruptos», agregó.

En lo que respecta al futuro, el informe detalló que para el 63%, la percepción de inseguridad se mantuvo igual en el último año y que para el 54% de los argentinos la situación se mantendrá en los próximos doce meses. Sólo el 13% piensa que la situación empeorado.

Al ser consultado por esta percepción tan negativa de la situación el investigador señaló que «a pesar del cambio de Gobierno, no hay grandes perspectivas de cambio» en materia de seguridad y volvió a vincularlas con la «baja confianza de las personas en la seguridad policial».

Fuente: Ambito