Llega la Navidad y todos estamos pendientes de las personas a las que más apreciamos para hacerles algún regalo. Los 27 jóvenes protagonistas de este vídeo, también. A ellos, sin embargo, los sentaron frente a una cámara para hacer un experimento: ver cómo cambia nuestra percepción de lo que más valoramos según las circunstancias.

Su protagonistas, chicos y chicas millennials —de entre 35 y 25 años— acudieron a la llamada a través de un castin que promovió la productora audiovisual 2:59 a petición de Generación 2015, la fundación que ideó la campaña.

Según explica por teléfono Manuel Domínguez, miembro de Generación 2015, la fundación surgió de la preocupación de un grupo de padres con hijos millenials por la falta de valores y el ritmo frenético de la sociedad actual. “Nuestro objetivo es servir de altavoz a los millenials y ponerlos en el centro de la ecuación”, señala Domínguez. “Creemos que existen unos valores básicos del ser humano que son independientes de nuestro género, creencias, ideologías, procedencia, etc… Y que esos valores pueden ser recuperados por los jóvenes”.

El vídeo que plantea esta reflexión fue compartido en el canal de YouTube y la página de Facebook de Generación 2015 con el hashtag #yocambiomiregalo. Desde el pasado 15 de diciembre llevan superadas el millón de reproducciones en ambas plataformas. “Nos gustaría que el mensaje que hemos lanzado se mantenga a lo largo de todo el año», explica Dominguez, «que no tengamos miedo a expresar nuestros sentimientos y no esperemos a perder algo para valorarlo».

Regalos materiales vs. experiencias

En general, regalar es algo que nos gusta hacer y que tiene beneficios psicológicos. Según explicó César Augusto García, miembro de la Asociación Nacional de Psicólogos, es una actividad que “contribuye a crear armonía y bienestar a nuestro alrededor, lo que nos ayuda a ser más felices”. Sin embargo, no siempre el dinero o los productos más caros son los que generan mayor satisfacción. Al contrario. El dinero suele defraudar y la ciencia señala que somos más dichosos cuando compartimos experiencias que cuando nos encontramos bajo el árbol bienes materiales.

Desde la agencia de márquetin y publicidad Wunderman señalan que “para este año 2016 quedarán atrás los dispositivos tecnológicos, ya que se puede observar cómo la nueva tendencia es regalar experiencias. Ahora se llevan los regalos intangibles como son los viajes o las suscripciones a servicios online como Netflix y Spotify”.

Además, según un estudio publicado en la revista Social Psychological and Personality Science, aquellas personas que prefieren disfrutar de tiempo libre por encima del dinero, resultan ser más felices a largo plazo.

Fuente: El País